Encontrando confianza y estabilidad para comenzar el día

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Descripción de la pista:

Esta MEDITACIÓN GUIADA, ENCONTRANDO CONFIANZA Y ESTABILIDAD PARA COMENZAR EL DÍA, nos ayudará a manejar nuestra inseguridad, dejar de amplificar las dificultades, abrirnos a los cambios inesperados, cultivar una confianza cálida y natural y hacer que nuestra mente esté más presente y estable. Aprenderemos a estar presentes, relajados y en paz.

Comencemos como siempre con la postura.

Después conectaremos con nuestro cuerpo y tomemos conciencia de que sensaciones corporales están surgiendo en él. Quizás algunas vienen, otras se van, pero es un mero descubrir, sin querer cambiar nada. Es cálido, amistoso, es un encuentro entre la mente y el cuerpo. Y en este descansar nuestra atención en las sensaciones corporales, simplemente permanece tranquilo y relajado. Se abierto, espacioso con aquello que descubras que tu cuerpo está experimentando. No intentes cambiarlo, meramente es lo que es, sensaciones corporales,

Después llevaremos nuestra atención a la respiración focalizándonos en el exhalar. Es un simple y mero exhalar. Es un mero confiar en saber que estamos exhalando. Es algo relajado, natural que nos conecta con nosotros mismos en el momento presente.

Cada vez que exhalas todo aquello que nos produce inseguridad, que es un reto a la hora de afrontar el día, simplemente vamos dejándolo que se disuelva por sí solo. Todas las inseguridades, las obligaciones, todos los deberías que tenemos que hacer a lo largo del día se van disolviendo de manera natural.

Poco a poco al hacerlo va también surgiendo un espacio natural de calidez, un espacio donde nos sentimos seguros, donde nuestra mente deja de estar tan perdida en ensoñaciones, está más estable, más fresca, más natural y hay meramente permanece en el exhalar, en el confiar en el momento presente.

Si de vez en cuando surgen pensamientos, emociones, recuerdos de la actividad que tenemos que llevar a lo largo del día, no los bloquees, pero tampoco te enredes con ellos, reconócelos como lo que meramente son, pensamientos y emociones. Igual que surgen los dejamos marchar, mientras que, de forma muy cálida, una y otra vez volvemos a nuestro exhalar.

Si de vez en cuando te descubres distraído, en el momento que te has dado cuenta, de hecho, vuelves a estar presente. Y esta es la clave de la práctica, así que no te preguntes por la distracción y de forma amistosa, cálida, serena regresa de nuevo a tu exhalación.

Va surgiendo un espacio de calidez, de estabilidad, un espacio en el que meramente estamos con nosotros mismos. Donde no tenemos nada que hacer, nada que conseguir, ni nada que lograr, es un simplemente ser.

Meditar no es hacer meditación sino más bien acostumbrar a nuestra mente a este estado relajado, presente, pacífico, pero también claro.

Permanece tranquilo, relajado, presente, no hay nada que hacer, no tienes nada que sostener, es un volver a casa, es un cuidar de nosotros mismos, aquí y ahora.

Dejamos de tanto remover nuestra mente y confiamos en nuestra respiración, dejamos que el exhalar nos sostenga en el momento presente.

Poco a poco, puedes ir soltando la atención en el exhalar. Meramente permanece presente, relajado, disfrutando de este instante, de este momento, de este simplemente ser.

No hay nada que hacer, no tenemos nada que conseguir y no hay nada que lograr. Es un espacio estable, lleno de confianza interior.

Marcas de tiempo

0:05 – Introducción y objetivo

1:00 – La postura

1:33 – Conectando con las sensaciones corporales.

3:05 – La exhalación.

4:30 – Un espacio natural de calidez

5:47 – Si te descubres distraído.

8:13 – Permanece tranquilo y relajado

10:27 – Extiende la meditación a tu día.

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